"Cristas" |
A-5 Cristas: ¿Jesús existió? ¿O
los humanos avistaron a Cristas y lo confundieron con él? Esto se preguntan los
científicos del Hangar negro al tener en contención a este demonio. Los dioses
existen, por eso este engendro demoníaco está encarcelado en el Hangar negro. A
los cazadores del hangar les tomó un milenio capturar a este despiadado ser,
capaz de manipular mentes mortales y capaz de destruir ciudades enteras con sus
poderes, fue recluido a una celda de tipo “A” las de máxima
seguridad, donde allí se contiene al experimento, demonio, entidad o criatura
con cámaras adecuadas a sus poderes malignos. En el caso de Cristas se lo tiene
dominado con barreras de contención psíquicas que imposibilitan usar su poder
mental para manipular humanos. Este demonio de la dimensión “sixtos” desertó de
sus filas demoníacas para implantar el caos en la tierra, él se encargaba de la
sección alta del infierno y tras una disputa con un alto consejero de las
fraguas tuvo que escapar de sus paramos. Cuando fue encontrado por primera vez
en la tierra, los que tuvieron la desgracia de toparse con él fueron dos
niños, a los cuales poseyó para luego matarlos y devorarlos. Mientras más
poseía personas más incrementaban sus poderes y así fue convirtiéndose en una
máquina de matar. Los primeros indicios de su aparición fueron en Alaska en
unas cuevas cercanas a un poblado paupérrimo. Es considerado de extrema
precaución, con un rango rojo se ha ganado el peor de los mejores puestos. No
debe ser liberado jamás y tiene que ser contenido a como dé lugar, los
científicos afirman que si Cristas escapa de su cárcel el fin de la tierra será
inevitable, puesto que la máquina que lo controla trabaja constantemente con su
mente y los estudios indican que este demonio desea escapar y liberar a todos los
engendros recluidos en el Hangar negro. Un mar de caos cernirá sobre la tierra
el día que esto ocurra y ya nada podrá salvar a los humanos, ni los mismos
dioses podrán porque el odio de los seres que habitan en el Hangar negro es de tanta magnitud que provocaría una ola masiva de exterminio.
Cristas sólo aguarda en su celda,
crucificado, desnudo y con su casco que lo domina por completo. Muy paciente espera a que
alguien lo libere para que el apocalipsis no sólo sea una visión desastrosa de
la humanidad, sino que sea una realidad.
Clasificación: Peligroso
No hay comentarios.:
Publicar un comentario