Quería poner fin
a una discusión conyugal y librarse de una vez de los malos humos de su amada.
Pero el plan para desaparecer de la escena le salió mal y acabó atorado en uno
de los conductos menos nobles de su edificio.
La historia ha ocurrido en Rusia, donde los servicios de rescate tuvieron que socorrer este miércoles a un hombre que se había quedado atascado en el conducto de evacuación de basuras en un bloque de pisos de la ciudad siberiana de Tiumen. Según informa el servicio de emergencias de la zona, el joven de 32 años escapaba de su novia con la que acababa de tener una bronca monumental.
Su sorprendente viaje empezó en un octavo piso, desde el cual se deslizó a través de la pestilente tubería por la que los vecinos tiran la basura hasta quedar atorado en el quinto.
Allí empezó a gritar ayuda hasta que los vecinos llamaron a los servicios de rescate, que tuvieron que cortar una parte del conducto de metal para poder sacarlo, según explicó la portavoz de emergencias de esa región, Elena Tretiachenko.
Terminar una discusión saltando por el hueco de la basura debió de parecerle la manera más elegante de poner fin a la disputa. Pero tras esta demostración de gallardía, el joven acabó requiriendo asistencia médica, y sin duda cada vez que tire la basura empatizará con los envases por el convulso viaje que les espera hasta el mundo exterior.
Vía de escape habitual
El uso de estos conductos para desaparecer de un sitio o esconder a alguien no es inédito en el país. Los servicios de emergencia de esta lejana región rusa ya tuvieron que socorrer a otra persona hace unos años atrapada en similares circunstancias, también con final feliz.
Más macabro fue el caso que se dio en la ciudad de San Petersburgo el año pasado, donde un borracho violó a un niño y lo escondió precisamente en esta vía de evacuación de la basura. Afortunadamente el pequeño, de dos años y ya agonizante, fue encontrado por un conserje que avisó a la policía, según informó la cadena HTB.
Fuente: elmundo.es
La historia ha ocurrido en Rusia, donde los servicios de rescate tuvieron que socorrer este miércoles a un hombre que se había quedado atascado en el conducto de evacuación de basuras en un bloque de pisos de la ciudad siberiana de Tiumen. Según informa el servicio de emergencias de la zona, el joven de 32 años escapaba de su novia con la que acababa de tener una bronca monumental.
Su sorprendente viaje empezó en un octavo piso, desde el cual se deslizó a través de la pestilente tubería por la que los vecinos tiran la basura hasta quedar atorado en el quinto.
Allí empezó a gritar ayuda hasta que los vecinos llamaron a los servicios de rescate, que tuvieron que cortar una parte del conducto de metal para poder sacarlo, según explicó la portavoz de emergencias de esa región, Elena Tretiachenko.
Terminar una discusión saltando por el hueco de la basura debió de parecerle la manera más elegante de poner fin a la disputa. Pero tras esta demostración de gallardía, el joven acabó requiriendo asistencia médica, y sin duda cada vez que tire la basura empatizará con los envases por el convulso viaje que les espera hasta el mundo exterior.
Vía de escape habitual
El uso de estos conductos para desaparecer de un sitio o esconder a alguien no es inédito en el país. Los servicios de emergencia de esta lejana región rusa ya tuvieron que socorrer a otra persona hace unos años atrapada en similares circunstancias, también con final feliz.
Más macabro fue el caso que se dio en la ciudad de San Petersburgo el año pasado, donde un borracho violó a un niño y lo escondió precisamente en esta vía de evacuación de la basura. Afortunadamente el pequeño, de dos años y ya agonizante, fue encontrado por un conserje que avisó a la policía, según informó la cadena HTB.
Fuente: elmundo.es
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